



MÁQUINA DEPORTIVA
Sergio Arturo Duarte Méndez
Maestro de maestros, pionero en la práctica y enseñanza del Karate Do Shoto Kan en la ciudad, seguidor fiel a los principios y valores de este estilo japonés como la ética, la disciplina, la honradez, el respeto, la cortesía y la espiritualidad, en busca del crecimiento y la autorrealización personal, el sensei Humberto Miranda es un ilustre personaje quien, con el pasar del tiempo ha construido una excepcional carrera en las artes marciales.
La destacada trayectoria de Miranda, un hombre barbado de 78 años y estatura media, quien se estableció en esta frontera en los años ochenta y aún compite en justas oficiales de carácter internacional contra artemarcialistas más jóvenes que él, inició a sus cinco años cuando empezó a tomar clases de este deporte.
El alumno más avanzado y, a la vez, el pupilo favorito del instructor japonés Shojiro Koyama, con el tiempo, desarrolló su potencial de tal manera que trotó por el mundo, conoció innumerables ciudades y países, visitó varios continentes, se adentró en culturas diferentes y para poder comer en el extranjero aprendió idiomas como el inglés y ‘masticó’ el japonés.
Como sensei, en su dojo, -en el cual, en una de sus paredes lucen las banderas de México y Japón y los cuadros de Funakoshi Gichin y Mashatoshi Nakayama, creadores del Karate Do Shoto Kan-, Miranda talla los ‘diamantes en bruto’ y pule su talento, día con día.
Miranda exige a sus alumnos una entrega máxima en cada kata o movimiento y corrige posturas.
También, alienta a los ñiños y niñas a pensar en grande, a no sentirse menos que los demás competidores de cara a un evento nacional, al tiempo que destaca su inteligencia y premia su esfuerzo.
Al final de la clase, sus pupilos se reúnen alrededor de él, en una afectuosa muestra de agradecimiento y gratitud.
Respetuoso y respetado en el medio por instructores de diversos artes marciales, para su ex alumno René Montaño -padre del campeón mundial André Montaño en ‘Miami 2018’-, Miranda es simple y sencillamente ‘El Último Samurai’.
Montaño recordó que en la dorada y gloriosa década de los 80, en su diario camino a casa, con la fiebre de la película Karate Kid, de Cobra Kai y Mr. Miyagui, en la calle Valentín Fuentes, casi esquina con Ejército Nacional, encontró un dojo con grandes ventanales en el cual, Miranda impartía su clase y compartía sus conocimientos con un grupo de alumnos.
Atraído fuertemente por la idea de practicar karate, Montaño se unió al dojo de Miranda, en el que estuvo por cinco o seis años.
“Para mí, es el mejor instructor de karate que tenemos en el estado y, tal vez, de los mejores de todo México”, destacó.
Montaño resaltó que, aparte de las enseñanzas propias de la disciplina en cuestión como es el karate, el sensei agrega otras igual o más importantes en sus sesiones, dirigidas a contribuir en la formación de niños y jóvenes deportistas, de mujeres y hombres.
“La enseñanza de valores que luego ya nos faltan en otros rubros como es el de saludar, el de despedirse, limpieza en el dojo, el hablarle al de enseguida, el de ayudarle al que tiene una cinta más baja que él, el trabajo en equipo a pesar de ser una disciplina individual, trabajar en equipo en el dojo para prepararse”, manifestó.
Añadió que Miranda -de trato cordial y amable, de interesante plática-, es una persona muy preparada en todos aspectos.
“Tanto en su dinámica de enseñanza como en la competitiva. Tuve la suerte de ver sus dos facetas, me tocó verlo cuando era mi maestro, todavía compite, pero me tocó verlo en sus ‘meros moles’ como a los 44 o 45 años-, todavía competía con los jóvenes y les ganaba a los ‘chavalitos’ de 20, veintitantos, era increíble verlo competir”, resaltó.
Subrayó que su maestro igualmente fue uno de los pioneros en combatir en peleas de jaula por varias ciudades del mundo, en una especia de liga.
Cuando Montaño se convirtió en padre y su hijo André se interesó en practicar el karate, no dudó ni un momento y rápidamente eligió a Miranda para que instruyera a su vástago.
El resultado: un par de medallas de oro, en Formas y en Combate, en el Campeonato Mundial de Karate celebrado en Miami, Florida, en 2018.
Cinco años después, en 2023, en la misma ciudad, aún con los tips de Miranda, aunque ya no bajo su total dirección, André obtuvo oro en Katas -Formas- y bronce en Kumite -Combate-.
“MIS RESPETOS PARA ESE SEÑOR, ES UN GRAN SENSEI”: LÓPEZ
En el andar en el camino y en el ‘rodar de las piedras’, en infinidad de torneos, el maestro Javier López, fundador de la Academia López Taekido, conoció hace 25 o 30 años al sensei Miranda.
“Yo en ese tiempo era cinta Intermedio, ya lo conocía. Después, fui evolucionando en las cintas, ya lo vi más en los eventos y mis respetos para ese señor, es un gran sensei. Es de los pocos que quedan de karate do, de los que tienen una gran trayectoria”, resaltó.
Como ser humano, López igualmente externó su admiración hacia Miranda.
“Y como persona también, lo admiro por su disciplina”, señaló.
López indicó que nunca fue alumno del ‘profe Miranda’.
“No, nunca tomé clases con él, pero tanto evento que lo he visto y su entusiasmo de seguir compitiendo, es un ejemplo para todos nosotros”, puntualizó.
MAESTRO EJEMPLAR
Nombre: Humberto Miranda
Fecha de nac: Febrero 1947
Edad: 78 años
Estilo de arte marcial: Shoto Kan Karate Do (japonés) de la JKAWF Américas (Federación Mundial de Karate Japonés Américas)
Inicio en el karate: A los cinco años como alumno
Pupilo favorito y alumno más avanzado del sensei japonés Shojiro Koyama
En la faceta de competidor ha participado en 16 justas mundiales en diversos continentes como Europa, Asia, África, Medio y Lejano Oriente
Igualmente, en torneos continentales -Panamericanos-, en Chile, Colombia y Perú
Recientemente fue reconocido por la Asociación de Karate de Japón como cinta negra Quinto Dan
A su edad, aún compite en eventos de distinto nivel contra artemarcialistas más jóvenes que él
EN FRASES
“Los instructores tenemos una gran responsabilidad para que -los niños- desarrollen su potencial porque el karate es un arte y un auténtico trabajo de esfuerzo, de espíritu físico y mental”
Sensei Humberto Miranda
“Es un ejemplo para todos nosotros”
Javier López, fundador de la Academia López Taekido
“Para mí, es el mejor instructor de karate que tenemos en el estado y, tal vez, de los mejores de todo México”
René Montaño, ex alumno de Miranda y padre del campeón mundial André Montaño