De acuerdo con las primeras versiones, la víctima presentaba un disparo en la cabeza y habría muerto durante la madrugada; sin embargo, su cuerpo fue descubierto hasta horas después por las autoridades.
En el lugar se aseguró un casquillo percutido como parte de la evidencia.
Vecinos señalaron que la vivienda era utilizada como un “picadero”, lo que ha generado preocupación en la zona debido a la constante presencia de personas ajenas a la comunidad.
Elementos de la Fiscalía General del Estado se hicieron cargo de las investigaciones para esclarecer el hecho y determinar si el crimen está relacionado con actividades delictivas.
El cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense para la necropsia de ley.
