La Fiscalía recibió la ropa interior así como el celular de Juan Manuel, quien apuntaba como el primer sospechoso de las investigaciones, pues conducía el carro donde raptaron la niña de tan sólo 7 años de edad, para realizar la investigación sobre el caso de la menor Camila Cobos.
Tras realizar los análisis de informática forense, las autoridades detectaron que el presunto asesino borró los videos que captó la violación y el asesinato de la niña, además de que pudieron establecer como existieron conexiones de internet cerca de San Diego de Alcalá.
Todo esto, lo realizó en la gasolinera que está por el lugar, reveló la Fiscalía.
Al juntar toda esta evidencia, fue como lo retuvieron y posteriormente lo presentaron ante el juez.