En el sexenio pasado, un millón de productores campesinos abandonaron sus tierras y dejaron de sembrar 4 millones de hectáreas. No debe seguir esta inercia, resaltó el activista agrario Javier Meléndez.
«La política agropecuaria no debe seguir diseñada desde los escritorios por los hombres de corbata, sin tener en cuenta a los campesinos», apuntó.
Hizo un llamado a los juarenses y chihuahuenses para que apoyen con su presencia la resistencia de los campesinos en los carriles de exportación e importaciones de los puentes Internacionales de Zaragoza, Libre, Guadalupe-Tornillo, San Jerónimo-Santa Teresa y Palomas-Columbus.
«El Gobierno Federal ha sido indolente y ciego, para ellos el problema no existe y si no existe, no lo van a resolver, porque nadie resuelve algo que no existe. Seamos parte de esta lucha por la dignidad del campo. Les esperamos», insistió.

