La sesión de la Comisión Permanente en el Senado de la República concluyó este miércoles en medio de golpes, empujones y gritos, luego de que el priista Alejandro “Alito” Moreno protagonizara una agresión contra el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, y un camarógrafo.
El episodio ocurrió al cierre de la discusión sobre el rechazo a la injerencia de ejércitos extranjeros en México. Moreno subió a la tribuna para reclamar a Fernández Noroña que no le había concedido el uso de la palabra. Mientras se entonaba el Himno Nacional, el priista encaró al presidente del Senado con gritos y ademanes: “¡Te estoy pidiendo la palabra!”, exigió, levantándole el dedo frente al rostro.
Aunque Noroña intentó calmar la situación, Moreno lo tomó del hombro y lo jaloneó. El morenista respondió con un firme: “¡No me toques!”, pero la confrontación escaló hasta que Moreno lo empujó y lanzó golpes, obligando a Noroña a retroceder para evitar la agresión.
En medio del forcejeo, un camarógrafo identificado como Emiliano González resultó alcanzado por los manotazos. De igual forma, el priista Carlos Gutiérrez Mancilla intervino y, aprovechando la confusión, golpeó con la mano al presidente del Senado. Legisladores de distintos partidos intervinieron para separarlos mientras se escuchaban gritos en el pleno.
Posteriormente, en conferencia de prensa, Fernández Noroña denunció la violencia ejercida en su contra:
“Me empezó a jalonear, empujar y golpear. Incluso me dijo: ‘te voy a partir la madre, te voy a matar’”, aseguró el presidente del Senado, quien adelantó que tanto él como el camarógrafo afectado presentarán denuncias formales por las agresiones y daños materiales.
El zafarrancho cerró abruptamente la sesión legislativa, dejando en evidencia la tensión política entre las bancadas y marcando uno de los episodios más violentos de la actual legislatura.
