La legisladora morenista Rosana Díaz Reyes no quita el dedo del renglón y en esta ocasión para darle seguimiento al terrible tema del Crematorio Plenitud que desde hace por lo menos un par de años acumulaba 383 cuerpos de cadaveres en condiciones totalmente insalubres, presentó este día una iniciativa a fin de reformar la Ley de Salud del Estado de Chihuahua, en relación a la gestión de residuos biológicos peligrosos y de quienes prestan servicios como crematorios y funerarias.
Manifestó durante su exposición de motivos que si la finalidad del Estado es ser garante de los derechos humanos, y prevenir y erradicar cualquier situación que ponga en riesgo la integridad de las y los ciudadanos, debemos destacar que su obligación radica en construir las condiciones y marcos regulatorios idóneos para evitar a toda costa cualquier desgracia o evento que lacere a la ciudadanía. “En esta ocasión me refiero a la operación de servicios funerarios, que, si bien cumple una función social indispensable, constituye una actividad industrial que, por su naturaleza, genera subproductos de alto riesgo, y el ignorar esta realidad, amparados en una legislación laxa o en la presunción de una buena fe que no se verifica, es ser permisivos ante las situaciones que en la actualidad lamentamos”. Díaz Reyes fue clara y contundente al expresar que resulta alarmante lo que estas amenazas biológicas y químicas generan y tienen además consecuencias devastadoras.
Por lo que, resulta necesario y urgente la actualización de la normatividad aplicable, incluso, el desarrollar técnicas mas avanzadas con el fin de garantizar que los procesos de cremación y desintegración de cadáveres se realicen en condiciones sanitarias adecuadas, y se inhiban las malas prácticas por parte de prestadores de servicios en detrimento de la seguridad sanitaria y así mismo atenuar el impacto ecológico que esto implica.