Ante la próxima protesta feminista por el 8 de marzo, las autoridades en la ciudad de Chihuahua han tomado una decisión que ha generado debate en la comunidad: proteger las ventanas y puertas de vidrio de los edificios públicos con placas metálicas.
Esta medida se ha implementado como una respuesta preventiva ante las protestas que se realizan cada año, las cuales, han resultado en daños al patrimonio cultura, la propiedad pública y privada.
El 8 de marzo se ha convertido en una fecha clave para miles de mujeres que se manifiestan en todo el país, exigiendo igualdad de derechos, seguridad, justicia y el fin de la violencia de género.
En Chihuahua, las protestas han sido parte de la tradición anual en la que colectivos feministas se han expresado en las calles, denunciando diversas problemáticas que afectan a las mujeres, desde la violencia machista hasta la falta de políticas públicas que garanticen su bienestar.
Sin embargo, en los últimos años, algunos sectores de la sociedad han manifestado su preocupación por los daños que se han registrado durante las marchas, particularmente en las instalaciones gubernamentales.
Las ventanas y puertas de vidrio de edificios emblemáticos, como la Presidencia Municipal, Congreso del Estado y el Palacio de Gobierno, han sido blanco de actos vandálicos, lo que ha llevado a las autoridades locales a tomar medidas preventivas.
A medida que se acerca la fecha, las expectativas en torno a la protesta del 8 de marzo crecen, tanto en apoyo a la causa feminista como en preocupación por la posible escalada de tensiones.