En el corazón de Parral se atesora una de las colecciones más grandes de tequila del mundo.
El empresario Edmundo Chacón fundó hace 5 años el primer hotel boutique del estado de Chihuahua y llevó a todos sus rincones una de las más grandes e importantes colecciones de tequilas del mundo.
El ingeniero civil de 85 años de edad inició su peculiar colección con 30 botellas y ahora miles de viajeros han podido conocer tequilas producidos en varios estados del mundo y fabricados para coleccionistas y sommelieres de todo el mundo.
Hace 33 años que arrancó la exhibición de sus tequilas y comenzó a colocarlas en grandes vitrinas a todo lo ancho y alto de las áreas comunes del ya afamado hotel boutique El Viejo Mundo.
En 1994 México logró la denominación de origen y el ingeniero Chacón tiene 800 marcas de nuestro mercado nacional, pero también tiene centenares compradas a coleccionistas de Asia, Europa y Los Estados Unidos.
“El 60 por ciento de las casi 30 mil botellas de tequila de mi colección me fueron regaladas por amigos, lo que me da mucho orgullo, porque sé que tengo el aprecio de muchos amigos”, comenta emocionado el hotelero.
Colores, sabores, precios, rareza, forman parte de las características de tantas y variados envases de tequila destilado en Jalisco, Nayarit, Guanajuato y hasta Tamaulipas.
Este es el sueño de un hombre 85 años cuyo lema de existencial se basa en que los seres humanos son marionetas del destino por lo que debemos vivir con felicidad y agradecimiento.
El hombre que fundó hace más de 50 años una de las constructoras más importante del país debe su longevidad y calidad de vida al trabajo y el amor familiar.
La casona de más de 200 años de antigüedad ahora alberga una de las colecciones más interesantes del mundo.
El hotel boutique de 8 habitaciones adiciona fotos antiguas, viejos adornos de la vida mineral y cultural de esta ciudad que es ahora Pueblo Mágico.
Pero el valor adicional de este lugar lo otorgan sus tequilas almacenados y clasificados por nombre, marca, procedencia, entre otros.
“Como en las bibliotecas, los tequilas están clasificados por autor por nombre , por dones por marcas; así tenemos los dones Julio, Cayo, Don Fulano, don Ramón y por ejemplo, el que quiera un tequila don Víctor tiene que ir a Roma, porque ahí se vende este producto mexicano que es de todo el mundo.
Quien visite Parral tiene que ir a este hotel-museo grandioso ubicado en la Calle Ojinaga 70, en pleno Centro Histórico.
Ahí puede ver y hasta degustar un buen tequilita y ver sus artísticos envases en forma de corazón, guitarra, tortuga y armas.
La invaluable colección comprende un gigantesco garrafón de tequila Cuervo del año 1905, botella única cubierta de chaleco de maguey, que por ningún precio se vende.