El presidente Andrés Manuel López Obrador reafirmó la postura de México frente a los conflictos internacionales, estipulada en la Constitución: no intervención, autodeterminación de los pueblos, cooperación para el desarrollo y solución pacífica de las controversias.
“Esa es nuestra postura. No queremos la guerra, no queremos la confrontación, no queremos la violencia. Nosotros sostenemos que es lo más irracional que puede haber, que puede existir: la confrontación, el uso de la fuerza y la guerra, que produce mucho sufrimiento. No queremos víctimas por las guerras. Lamentamos mucho lo que está pasando por este enfrentamiento de palestinos e israelitas”, remarcó.
En conferencia de prensa matutina, el jefe del Ejecutivo sostuvo que la Organización de las Naciones Unidas debe tomar un papel protagónico, realizar acciones contundentes de mediación hacia la búsqueda de la paz y pronunciarse en una asamblea, con la participación de los países miembros, por el diálogo que promueva la solución pacífica.
“Sentimos que hace falta más actividad de la ONU, actuar más y no quedarnos con los procedimientos de antaño de que todo pasa por el Consejo de Seguridad y si un miembro veta una iniciativa que va con el propósito de conseguir la paz, ya se paralizó, ya se nulificó por completo. Eso debe cambiar”, enfatizó.
El presidente reiteró que en México “no queremos tomar partido porque queremos ser factor para la búsqueda de una solución pacífica. Cuando se enfrentan estos conflictos tan lamentables, de mucha gravedad, más que condenas lo que requiere es búsqueda de soluciones pacíficas, que se dialogue y que se evite el que escale más la confrontación y la violencia. Ya son hasta ahora lamentablemente muchos muertos, tanto de Israel como de Palestina y no queremos eso. Vamos a seguir convocando al diálogo”.