El Fiscal General del Estado, César Peniche Espejel negó cualquier acto de tortura en contra del imputado Alejandro G. G., ya que la Institución siempre ha actuado de manera cabal, íntegra y con irrestricto apego a los derechos humanos.
“Ni antes, ni después, ni durante el proceso de investigación o de vinculación a proceso, se ha ejercido este tipo de prácticas y ante la serie de señalamientos, nosotros mismos solicitamos la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, pedimos la presencia de un visitador, quien realizó su entrevista y tiene bajo estricta vigilancia y escrutinio las certificaciones y valoraciones médicas que se tienen que hacer”, explicó.
Peniche Espejel dio a conocer que el imputado nunca estuvo incomunicado, pues de los 21 días sujeto a la prisión preventiva, ha recibido en diez ocasiones la visita de su familia y siete la de sus abogados; por lo cual quedan totalmente descartadas las versiones efectuadas por su representante legal.
“Esto es una estrategia mediática, no hay absolutamente nada que puedan sostener o seguir aduciendo en cuanto a una cuestión de tortura; reitero, no hay ningún maltrato ni físico o psicológico y mucho menos arrancamos confesiones de esa manera como han referido”, dijo
Comentó que el pasado 08 de enero, compareció ante un juzgado de distrito el actuario para notificarle a Alejandro G. G. la interposición de un amparo a su favor, supuestamente por incomunicación, malos tratos y tortura; estando presente la autoridad, el mismo imputado no ratificó el amparo, entonces esto echa por tierra la afirmación que realiza su defensa.
“Es sabido del conocimiento general que todas las audiencias son públicas y que cualquier declaración que sea tomada de una persona sin estar asistido por su defensa es automáticamente nula. De ahí que no pueda concederse ninguna veracidad a ese señalamiento”, concluyó.